Hola, mi nombre es María Donna May Del Mundo (¡uf!) pero puedes llamarme Donna.

Soy madre de dos niñas y un gato. Mis pasatiempos son jugar a la Nintendo Switch y viajar. Me gusta especialmente viajar en motocicleta porque me permite apreciar más las vistas, pero solo lo hacemos si no viajamos con niños. Decidí convertirme en facturadora médica porque siempre me ha apasionado la atención médica y la organización. He experimentado dificultades y discriminación cuando sufrí un aborto espontáneo en 2014, por eso entiendo la importancia del seguro y de la facturación precisa a un paciente.

Disfruto de la naturaleza meticulosa de la facturación médica, donde la atención a los detalles es crucial. Ayudar a los pacientes a comprender sus gastos médicos, luchar contra las compañías de seguros y asegurar que los proveedores de atención médica reciban el reembolso adecuado por los servicios que brindan me da una sensación de satisfacción. Convertirme en facturadora médica me permite combinar mi pasión por la atención médica con mis habilidades organizativas para marcar una diferencia positiva en la vida de los pacientes.